Capitulo 14: Buscando trabajo

Ya llevábamos una semana viviendo en la casa nueva, y todavía no teníamos trabajo lo que significaba que no podríamos pagar el alquiler, así que pensamos que posiblemente en la tienda de ropa de abajo necesitarían una nueva dependienta, y como no perdíamos nada por preguntar, fue lo que hicimos.

— Hola, buenos días -dijo la chica
— Hola, queríamos saber si necesitaban a nuevas dependientas -dije
— Pues, la verdad es que una chica acaba de irse y dejar un puesto libre, así que estáis de suerte -nos dijo
— Eso es…-empezó a decir Nerea pero yo la corté
— Espere, ¿a dicho un puesto? -dije
— Así es -dijo la chica
— Pero nosotras somos dos -dijo Nerea
— Lo siento, pero solo puedo contratar a una -dijo la chica
— Yo creo que una de las dos debería aceptar y que otra siga buscando ¿no? -dijo Nerea
— Si, porque como no paguemos el alquiler nos van a echar -dije
— Pero… ¿Quién se queda con el? -dijo Nerea
— Quédate tú, yo seguiré buscando -dije
— Pero… -comenzó a decir Nerea pero la corté
— Nada de pero’s acepta el trabajo, yo seguiré buscando -dije
— ¿Estas segura? -dijo Nerea
— Si -dije
— ¿Y bien? -dijo la chica -¿quién se queda con el trabajo?
— Yo -dijo Nerea
— Muy bien, aquí tienes tu horario -dijo la chica dándola un papel -empiezas mañana
— De acuerdo -dijo Nerea

Bueno, Nerea ya tenia donde trabajar, ahora solo faltaba que yo encontrase algo, y me acordé que mi primo tenía un bar-cafetería por aquí cerca y que a lo mejor me podía contratar, se lo dije a Nerea y decidió acompañarme.

— Hola Axel -dije entrando por la puerta
— Hombre, prima cuanto tiempo -dijo dándome un abrazo -¿Qué te trae por aquí?
— Pues verás, me acabo de mudar a un piso con mi amiga Nerea -dije señalándola -y necesitamos dinero para pagar el alquiler, y pensado que a lo mejor podías contratarme para que trabaje aquí.
— ¿Cómo? -preguntó sorprendido
— Por favor Axel -le suplique -necesito un trabajo
Después de suplicarle durante varios minutos aceptó.
— Muchas gracias -dije abrazándole.
— Mañana a primera hora te quiero aquí ¿de acuerdo? -me dijo -te tengo que explicar algunas cosas.
— De acuerdo, gracias Axel, te prometo que no te vas a arrepentir -dije
— Eso espero -me dijo