sábado, 26 de enero de 2013

Capitulo 12: Piso nuevo


Esta recogiendo las últimas cajas, tantos recuerdos quedaban en aquella habitación, pero ahora me iba a vivir sola, bueno, me iba a vivir con Nerea, su tía nos había conseguido un piso, nos pondríamos a trabajar para poder pagar el alquiler a la casera.
Aún recuerdo la cena de hace unos días cuando les dije a mis padres que me iba a ir…

*Flashback*

— Mamá, Papá, tengo que deciros una cosa -les dije
— Dinos, hija -me dijo mi padre
— Pues, he estado hablando con Nerea, y me hemos pensado que como ya tenemos 18 años, pues no gustaría independizarnos, quiero decir, irnos a vivir juntas -les expliqué

Se quedaron unos minutos callados y luego mi madre habló.

— Pero como te vas a ir de casa, si solo tienes 18 años, haber, ¿de que vais a vivir?
— Pues ya buscaremos trabajo.
— ¿Y el piso?
— Su tía es agente inmobiliaria, ella nos va a encontrar piso.
— No, no, tu no te vas.
— No os estoy pidiendo permiso, os estoy avisando, ya tengo 18 años, soy mayor de edad.
— ¿A ti te parece bien? -le dijo a mi padre.
— Tu hija tiene razón, tiene 18 años, y puede hacer lo que quiera, a mi no me parece mal mientras seas feliz -dijo mi padre
— Gracias papá.

*Fin del flashback*

La verdad es que todo había sido gracias a mi padre, me alegró que me dejará, pensaba que él también se iba a oponer, como mi madre.
Estaba llegando al piso, allí estaba Nerea, desempaquetando algunas cosas.

— Ey, hola ¿necesitas ayuda? -me dijo
— No tranquila, puedo sola -le dije dejando las cajas en el suelo. - Estas son las últimas, yo ya he traído todo ¿y tu? ¿te falta algo?
— Yo también he terminado, estas eran mis últimas cajas -me dijo
— Ey, chicas ¿necesitáis ayuda? -nos dijo una voz por detrás que me resultaba familiar, nos dimos la vuelta y allí estaban.
— ¿Qué hacéis aquí? -pregunté sorprendida.
— Nerea nos dijo que os mudabais y nos dio la dirección -explicó Blas
— Pensamos que necesitabais ayuda y bueno, hemos venido ayudaros -dijo Álvaro
— Gracias chicos, es un gran detalle pero no queremos molestaros en serio, seguro que tenéis muchas cosas que hacer -dijo Nerea
— Hoy ya nada, estamos disponibles todo el día -dijo Dani
— Y os vamos a ayudar queráis o no -dijo Carlos
— Esta bien, como queráis -dijimos Nerea y yo
— Estupendo, pues… ¡manos a la obra! -dijo David

No hay comentarios:

Publicar un comentario